Sistemas de ordeño rotativos

A pesar de ser uno de los más antiguos equipos de ordeño, el «carrusel» o el equipo de ordeño tipo rotativo todavía intriga a algunos productores o asesores del área, por su aparente complejidad. Pero, en pocas palabras, intentaremos explicar su extrema simplicidad y sus principales beneficios.

El primer modelo fue lanzado en 1930, en Europa, e incluso después de algunas mejoras de diseño y avances tecnológicos, el concepto de equipo rotativo permanece prácticamente intacto y ayuda a los productores a crecer, a nivel mundial.

Con modelos que varían entre aplicabilidad (Ej.: para rodeo a pasto, con o sin alimentación individual en la sala de ordeño, para rodeo confinado, razas mayores o menores) y número de puestos (de 24 a 106 animales ordeñados cada rotativa completa) siempre respetan una secuencia básica de funcionamiento:

1. Los animales llegan hasta la plataforma rotativa a través de la sala de espera por medio de un puerta aproximadora y automática (preferentemente).
2. Ingresan a la plataforma por un acceso único, donde ya se posicionan para el proceso de ordeño.
3. Una vez en la plataforma (en movimiento giratorio) se inician los procedimientos de ordeño:
   1. Prueba de primeros chorros y pre-dipping (normalmente en la segunda posición  desde la entrada  a la plataforma).
   2. Secado de los pezones y colocación del conjunto de ordeño (normalmente entre las posiciones 7 y 9 en relación a la entrada  a  la plataforma).
   3. Monitoreo de los conjuntos de ordeño y recolocación (si hubiera algún desacoplamiento anticipado). En muchos casos esa tarea es compartida con quien hace el post-dipping.
   4. Post-dipping que se inicia, normalmente, a partir del cuarto final de la rotación de la plataforma.
4. Segunda vuelta (excepciones), si la primera no fue suficiente para completar el ordeño.
5. Salida de la plataforma y caminata hacia el agua, comida, descanso o algún manejo.

Conceptualmente, podemos dividir las rotativas entre tres tipos:

1. Ordeño interno: Los ordeñadores se posicionan internamente a la plataforma.
2. Ordeño externo: Los ordeñadores se posicionan externamente a la plataforma.
3. Ordeño robotizado: No hay ordeñadores pero sí robots ejecutando los procedimientos correspondientes.

En general, las rotativas de «ordeño interno» y también llamadas «espina de pescado» se emplean en propiedades de pequeño a mediano tamaño (de 150 a 450 animales en lactancia), siendo un sistema que permite una óptima visualización de todos los animales, durante el ordeño, y requieren menos mano de obra en la fosa, normalmente son propiedades familiares, siendo los ordenadores miembros de la familia.

Mientras que las de «ordeño externo» y también llamadas «paralelas» son las elegidas para grandes operaciones, rodeos por encima de 450 vacas en lactancia. Las de «ordeño robotizado» se aplicarían para los dos perfiles ya citados buscando, principalmente, reducción de costos de mano de obra y consistencia en el manejo del ordeño.

Sus principales beneficios:

• Rendimiento de ordeño: el hecho de que las vacas se muevan en una plataforma circular hacia los ordeñadores, contribuye al flujo continuo y estandarizado de animales durante todo el proceso de ordeño; Los equipos que permiten al productor alcanzar capacidades de ordeño de más de 600 vacas por hora, dependiendo de algunos otros factores, como: tamaño de la plataforma, entrenamiento de los ordeñadores, productividad animal, manejo de la entrada de los animales,  rutinas de ordeño, etc.
• Confort animal: Cada vaca se coloca individualmente en un puesto,  diseñado específicamente para sus dimensiones, de acuerdo  a su raza (Ej.: Holstein o Jersey). Incluso individualizadas, las vacas continúan manteniendo contacto visual con sus compañeras, lo que las  mantiene más tranquilas y confortables.
• Confort a los ordeñadores: La rutina de ordeño en una rotativa permite al ordeñador reducir su desplazamiento, en comparación con los otros sistemas de ordeño (Ej.: En una rotativa, un ordeñador llega a caminar cerca de la mitad de la distancia que  recorrería en un equipo estático tipo «paralelo»). Además  puede dar un enfoque total  a su tarea, ya que  no tiene que preocuparse por el ingreso y posicionamiento de los animales.
• Más leche por hora de operación: El equipo responde con alta capacidad a medida que el rodeo crece. Directamente ligado al rendimiento de ordeño, ya citado, la posibilidad de ordeñar más vacas por hora permite al productor contar con un incremento de animales, viabilizando su Proyecto actual y/o facilitando la  toma de decisiones para futuras inversiones.
• Posibilidad de robotización: Con el escenario de mano de obra para ordeño cada vez más complicado, ya sea por disponibilidad, calidad y costos, existe la posibilidad de automatizar por medio de robots, el pre y/o post-dipping (DeLaval TSR®) y, en el caso de automatización completa, todo el proceso de ordeño (DeLaval AMR®).

Importantes consideraciones:

1. Un ordeñador que se enfoca en su actividad, tiende a mejorarla y a hacerla con más consistencia.
2. Una vez con el conjunto de ordeño acoplado, todas las vacas tienen el mismo tiempo, invariable, de extracción de leche (tiempo de una rotación completa).
3. La velocidad de rotación se puede ajustar según el tiempo de ordeño de los grupos. De esta forma, es posible combinar la agilidad de los ordeñadores con el tiempo de ordeño de las vacas, llegando al máximo rendimiento.
4. La limpieza externa del equipo puede ser optimizada mientras los últimos animales todavía están en rotación en la plataforma, sin pérdidas de tiempo.

Las rotativas son equipos extremadamente robustos y eficientes, pero son varios los factores que determinan la decisión de invertir en uno u otro modelo de equipo de ordeño: calidad de la mano de obra y su respuesta al aumento de rendimiento, estilo de gestión de esa mano de obra, rendimiento de ordeño, comodidad a dar a los ordeñadores (favorece la retención de empleados), longevidad animal (por el confort obtenido en el proceso de ordeño), productividad animal, construcción y obra civil para el centro de ordeño y experiencia en la actividad. Sin embargo, lo más importante de esta decisión, es el claro entendimiento sobre los objetivos del establecimiento y su relación con la nueva inversión.

Fuente: https://www.ganaderia.com/